Cuando te preguntan...

El otro día me preguntaron sobre todo lo que aprendí en todo este tiempo, tenia  que explicar que significaba emigrar o empezar un largo viaje y cual era la conclusion.

Primero pensé que seria fácil y que podría hablar de ello, pero al final me había ido para encontrar un mejor futuro que no he encontrado. He crecido como persona, ahora observo el mundo de una manera diferente, pero esta manera me aleja de lo que me hacia ser parte de mi grupo de amigos, y al final después de casi cuatro años, he descubierto que la familia no es exactamente la familia, que la gente vive totalmente sola en la mitad del mundo, que la gente es capaz de pasar por al lado de un mendigo sin ni siquiera sentir empatía y  que al final yo continuaba sola, y más perdida que nunca.

Por suerte antes de enviar mi discurso pude recordar por que me fui. Y es que a veces olvidamos nuestros sueños de niños. ¿ Cual era el tuyo?

Me fui porque toda la vida habia querido ser mayor, habia empezado a ir a la escuela sola con tan solo 5 años, habia aprendido a despertar y hacerme el desayuno y aprendí a ser racional con tan solo siete, aprendí que algun día jamás sería mama, por que nadie me enseño a serlo, aprendí a no creer en los hombres, aprendí que cuando vienen tiempos malos es mejor no pensar que ese golpe será el último ... pero que al final del día miraba por la ventana para ver a su papa en alguna estrella, hablaba con los pájaros para que le enseñara a volar y cantaba desde la cima de un árbol mientras pintaba un mundo mejor. Pero al final a lo diecisiete tenia novio, trabajo, ... y parecía mas enfocada en las responsabilidades en saber que podia aprender de los errores. Me olvide  de aquella niña que cuando nadie la miraba se escapaba para ver lo bonita que es la naturaleza. Me olvide. Todos los días de mi vida me dijero que tenía que ser responsable, que mama no podía hacer mas , que yo tenia que aprender a ser mayor, a escuchar la realidad, la crisis,...Y en algún momento creí que no había más. Cuando me fuí fue una ventana nueva, tenía todo el mundo para volver a soñar en ser quien quería ser. Y aprendí lo más importante de todo,... y es que sí que se puede hacer un mundo mejor, porque se necesita muy poco. Hacer feliz a la gente que quieres.