Malos entendidos

Cuando se esta lejos de casa, lo que ocurre en casa cada día es una interrogante mas. No me quiero imaginar lo que sería esperar una carta que nunca llega.

Todos empezamos a hablar al menos una vez por semana e incluso dos. Con cambios horarios unos comen y otros cenan , o unos desayunan y otros se van a dormir, Así con los horarios ya nos volvemos locos por encontrar el tiempo adecuado.  Y Finalmente el trabajo, los problemas, las nuevas personas que entran en sus vidas y todos los factores que ocurren a tu alrededor hacen que ese día que tienes libre no lo quieras pasar delante del ordenador.  Y así las redes sociales hacen que sigas conectado, que 200 amigos en cada ciudad pero al final solo recibas un Hola, ¿qué tal?

Lo peor es que estamos lejos vemos pasar las cosas y aunque la vida de todos van cambiando, tu no solo sientes que no estas allí, que te han explicado algo tres meses después o que si no hubiese sido por la foto colgada en Facebook jamás te hubieses enterado. Lo peor son los meses que van pasando en un país desconocido. En esos meses cambias de casa varias veces, conoces a gente que viene y que va, te sientes solo, te quedas sin recursos, lloras en voz baja para no despertar a tus compañeros de piso, te sientes fuera de lugar, tienes problemas con la visa, te enfadas, descubres nuevos sitios, entiendes que todo lo que sabias era solo el comienzo y al final cuando llega esa pregunta lo único que dices es : bien, y tu?

Por eso a veces me pregunto que sera la que realmente estará pasando en casa cuando pasan los meses en los que no hablamos, que sera lo que pasa cuando me dicen que están ocupados y no pueden hablar durante semanas...Será que en casa ahora solo seré la invitada.